José Dunker
En cada lanzamiento de un nuevo iPhone, Apple logra como ningún otro fabricante en el mundo crear en millones de personas la necesidad y el deseo de comprar el nuevo modelo.
¿Por qué todos quieren los productos Apple? ¿Y por qué la marca es tan deseada y admirada?
Una respuesta a esto es innovación, algo que fue incorporado en el ADN por su creador.
Innovar es un proceso complejo, pero sin esto es casi imposible destacarnos en lo que hacemos. Steve Jobs a través de Apple, desarrolló un modelo innovador que transformó no solo el mundo de la tecnología sino también la manera en cómo se comercializan los productos. Apple no sólo tiene fantásticos productos, sino también y no menos importante la mejor estrategia de publicidad.
Una de las mejores definiciones de como funciona el modelo de ventas de Apple, fue expuesto por Simon Sinek. El explicaba que contrario a vender productos basados únicamente en sus características físicas, la estrategia de Apple desde sus inicios es vender lo que él define como el ¿POR QUÉ?
Cuando el potencial usuario entiende el ¿POR QUÉ? Apple ha decidido asumir un compromiso con la innovación y calidad. Y que el resultado de este mágico proceso es el iPhone, de inmediato recibe una conexión con la marca. Una vez dentro del ecosistema, cada usuario se convierte en promotor y defensor de lo que se pudiera llamar el culto Apple.
El éxito más grande para este gigante ha sido lograr posicionar la marca como un símbolo de calidad, prestigio y sobre todo innovación.
Apple hoy en día es la marca más valorada en el mundo. Cuando vemos el logo en cualquier producto, de inmediato lo asociamos a adjetivos como calidad, prestigio e innovación. Fieles compradores están dispuestos a hacer largas filas para esperar un nuevo producto, hasta incluso ignorar por completo a los competidores.
Esta fórmula ha tenido un increíble éxito, más allá del que probablemente soñó su creador.
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